Se trata de la sexta catedral más grande del mundo y la segunda de los Estados Unidos. La catedral pertenece a la Iglesia episcopal, y las labores de construcción duraron nada más y nada menos que 83 años: empezaron el 29 de septiembre de 1907 y fue inaugurada por George Bush en 1990.
Aunque ya se celebraban ceremonias importantes antes de la inauguración, no todas las capillas estaban terminadas. Además, se ha restaurado la catedral recientemente a consecuencia de los daños sufridos en el terremoto de 2011.
En su construcción han trabajado cuatro arquitectos. El proyecto inicial, de estilo neogótico, se debe a George Frederick Bodley, mientras que el paisajista Frederick Law Olmsted diseñó la zona del altar mayor y del presbiterio. Tras la muerte de Bodley en 1907, un colaborador suyo introdujo algunos cambios en el diseño original, pero la construcción se vio interrumpida durante la Primera Guerra Mundial. Cuando se retomaron las obras, un estudio de arquitectura neoyorquino se encargó de finalizar su construcción, manteniendo la idea original, incluida la incorporación de la tercera torre y la ampliación de la gran fachada oeste.
En la Catedral Nacional se han celebrado numerosas ceremonias públicas, incluidos los funerales de tres presidentes de los Estados Unidos, entre ellos Ronald Reagan, y actos religiosos en memoria de grandes personajes, como el astronauta Neil Armstrong, el primer hombre en pisar la Luna, y el presidente sudafricano Nelson Mandela.
Franklin Delano Roosevelt, Barack Obama y Donald Trump, entre otros, vinieron aquí a rezar tras ser nombrados presidentes.
Desde el púlpito de esta suntuosa catedral, el reverendo Martin Luther King, Jr. dio su último sermón dominical a los fieles, el 31 de marzo de 1968, pocos días antes de su asesinato.
Curiosidad: Philip Hubert Frohman, el último arquitecto en trabajar en la construcción de la catedral, fue un verdadero niño prodigio. Diseñó su primera casa con 14 años y se licenció en Arquitectura con tan solo 16.
Idioma: español