A comienzos del siglo XX, Bérgamo estaba cambiando de rostro. La ciudad, hasta entonces concentrada en la parte alta, empezaba a vivir un período de expansión económica y social que requería nuevos espacios, más modernos y funcionales. En este contexto nació la idea de crear un auténtico centro urbano en la parte baja. Para este ambicioso proyecto fue convocado uno de los nombres emergentes de la arquitectura italiana del momento: Marcello Piacentini.
El proyecto tomó forma a partir de 1907 y se desarrolló durante más de veinte años. La zona elegida correspondía al área que antaño ocupaba la Feria de San Alejandro, un gran mercado que desde el siglo XVII atraía a comerciantes, artesanos y visitantes de toda Lombardía. Durante más de dos siglos, la feria fue el principal acontecimiento económico y social de la ciudad, animando cada año el barrio con puestos, espectáculos y transacciones comerciales que convertían a Bérgamo en un animado punto de encuentro regional. El objetivo del nuevo proyecto era rediseñar completamente aquella zona para crear un centro moderno.
El nuevo barrio se desarrolló en torno a un eje principal que, desde el viale de Porta Nuova, conducía hacia la colina de la Ciudad Alta. A lo largo de este eje se articulan todavía hoy las áreas más representativas del Centro Piacentiniano: el Sentierone, con sus soportales y cafés históricos, la Piazza Vittorio Veneto, dominada por la Torre dei Caduti, y la Piazza Dante. En este conjunto se encuentran edificios como el Banco de Italia, el Palacio de Correos, el Crédito Italiano, la Cámara de Comercio y el Palacio de Justicia, todos ellos caracterizados por un estilo sobrio y monumental.
Piacentini quiso que cada perspectiva estuviera estudiada en relación con las demás: las líneas de los soportales, la altura de los edificios, la simetría de las plazas e incluso la elección de los materiales contribuyeron a dar unidad al conjunto.
Con la finalización de la Torre dei Caduti en 1924 y de los principales palacios administrativos hacia 1927, el centro urbano de la ciudad se desplazó del casco histórico medieval, la Ciudad Alta, a la moderna Bérgamo Baja.
Curiosidad: el proyecto presentado por Marcello Piacentini al concurso de 1907 llevaba por título “Panorama”, un nombre simbólico que expresaba perfectamente su idea de ciudad: un lugar donde el orden arquitectónico y la modernidad pudieran abrirse, en perspectiva, hacia la colina de Bérgamo Alta, manteniendo así un vínculo ideal entre pasado y futuro.
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