Entre los entrantes más conocidos destacan los nazarenos, lampascioni en italiano, unos bulbos que parecen pequeñas cebollas, se cuecen en agua y vinagre, y se sirven en aceite. Pero también puedes encontrar alcachofas o flores de calabacín rebozadas y fritas, y los deliciosos rollitos de berenjena, rellenos de queso, mortadela y horneados con salsa de tomate. Las berenjenas también se usan para elaborar las sabrosas albóndigas fritas aromatizadas con menta.
Si prefieres los sabores del mar, te recomiendo los cozze arraganate, mejillones gratinados con pan rallado, alcaparras y perejil.
El primer plato más característico es la pasta hecha a mano, como las famosas orecchiette, acompañada con grelos, mejillones o berenjenas y mozzarella; en este último caso, se les llama orecchiette alla Sant'Oronzo. Pero la especialidad de Salento son los ciceri e tria: pasta fresca, parecida a los tallarines pero sin huevo, primero frita en aceite de oliva y después hervida junto con los garbanzos o ciceri. Típicos de Salento son también los sagne 'ncannulate con ricotta forte, una pasta fresca y retorcida con tomate y requesón curado, de sabor fuerte y picante.
En Lecce, hacen a mano hasta los macarrones, y los puedes probar condimentados de varias formas.
También te recomiendo el puré de habas con achicoria, la pasta con repollo, los tallarines con coliflor, y la pasta con alubias alla leccese, con alubias pintas trituradas y tomate.
Entre los segundos platos de carne más particulares destacan los pezzetti, trozos de carne de caballo guisada con tomate y hierbas aromáticas. También podrás probar la carne de caza o cordero asado, o en salsa. Con las vísceras del cordero también se preparan unos rollitos llamados Turcinieddhri. Las albóndigas de carne de res y queso pecorino cocinadas con salsa son muy populares.
Si prefieres pescado, te recomiendo la dorada al horno con patatas, el filete de pez espada rebozado en harina y huevo y frito, el guiso de pulpo, cocido con patatas y alcaparras, o la pignata, pulpo guisado con tomate.
Curiosidad: uno de los dulces típicos de Lecce tiene un nombre muy divertido. Se llama pasticciotto, «chapuza» en italiano. Pero no tengas en cuenta su nombre. Es una verdadera exquisitez de masa quebrada rellena de crema pastelera que también tiene otras variantes. Espero que no seas muy goloso, ¡porque no te podrás resistir!
¡Que aproveche!