La iglesia de San Carpoforo es un edificio desconsagrado ubicado en el centro histórico de Milán. La estructura original pertenecía a un templo pagano romano, con hallazgos como columnas de pórfido, mármoles preciosos y un mosaico. Se dice que el antiguo edificio milanés dedicado a Vesta fue consagrado a San Carpoforo. La primera evidencia históricamente comprobada de la iglesia data del año 813. Experimentó modificaciones significativas en los siglos XI y XVI. En 1809, fue desconsagrada y utilizada como archivo.