La Fuente de los Putti, joya artística en mármol de Carrara, embellece la entrada a la Plaza de los Milagros en Pisa. Construida entre 1746 y 1765 por Giuseppe Vaccà y Giovanni Antonio Cybei, presenta un pedestal con motivos de hojas de acanto y dos tritones luchando contra un monstruo marino. En 1763, Antonio Cybei esculpió tres querubines sosteniendo los escudos de Pisa y del Opera del Duomo. Con el tiempo, la fuente ha enfrentado propuestas de modificación, pero ha resistido, conservando su significado simbólico y la representación de la infancia. Su revalorización en el siglo XIX y su creciente visibilidad a través de postales y redes sociales la han consolidado como ícono en el paisaje urbano de Pisa.