La batalla de San Quintín, ocurrida el 10 de agosto de 1557, fue un enfrentamiento entre los ejércitos francés y español, con la participación de contingentes saboyanos. Fue un episodio crucial en los conflictos entre España y Francia por el control de los territorios italianos. La batalla tuvo lugar cerca de la fortaleza de San Quintín, que bloqueaba la ruta más rápida del ejército español hacia París. El ejército francés, dirigido por Montmorency, fue derrotado por las fuerzas españolas lideradas por Emanuele Filiberto y respaldadas por tropas piamontesas y saboyanas. Aunque Felipe II de España no aprovechó plenamente la victoria, dos años después, la Paz de Cateau-Cambrésis consolidó el dominio español en Italia, poniendo fin a las largas guerras de Italia y devolviendo territorios a los Saboya como recompensa.
