La Basílica Julia fue un edificio público en el Foro Romano en Roma, Italia. Fue construida por el emperador Augusto en el siglo I a.C., y luego reconstruida y ampliada por el emperador Domiciano en el siglo I d.C. La basílica era utilizada como lugar de reunión para los negocios legales y judiciales, así como para actividades comerciales. Tenía una amplia nave central con dos naves laterales y numerosas columnas para soportar el techo. La Basílica Julia fue una de las principales basílicas del Foro Romano y se considera uno de los mejores ejemplos de la arquitectura civil romana.