¡La plaza de España es uno de los lugares más pintorescos de Roma!
La plaza en la que te encuentras ahora, tal vez en la famosa escalinata de la Trinidad dei Monti, toma su nombre del edificio que aún hoy alberga la Embajada de España ante la Santa Sede, y se extiende al pie de la colina del Pincio, al final de la elegante via Condotti. Su fantástica escenografía sirve de marco para espectáculos, desfiles de moda, eventos sociales y decoraciones florales.
Debes saber que la estructura actual de esta zona comenzó a tomar forma en el siglo XVI, cuando se construyó la iglesia franciscana de la Trinidad dei Monti, con sus dos campanarios gemelos. Delante de la fachada se alza un obelisco egipcio que fue colocado por el papado a finales del siglo XVI.
El problema era que para llegar desde la plaza de España hasta la cima de la colina, donde se encontraban la iglesia y la cercana Villa Medici, sólo había dos incómodos senderos.
La decisión de construir la escalinata se tomó en 1660, pero los trabajos no empezaron hasta sesenta años más tarde, por orden explícita del papa. Después de un concurso entre arquitectos, se eligió la solución que tienes ante tus ojos: una amplia escalinata compuesta por doce rampas de travertino, para un total de 135 escalones, y decorada con terrazas ajardinadas. Observa cómo la alternancia entre rampas y balconadas, que se suceden en zigzag, dividiéndose y reuniéndose, crea un movimiento teatral y extremadamente variado, por el que se alternan recorridos rectos, curvos y poligonales. La escalinata así concebida se libera de la obligación de disponer de una estructura regular, y se integra armoniosamente con el espacio urbano. De esta manera el observador puede verla primero desde lejos en una visión general, para luego admirar la riqueza y variedad de los efectos escenográficos mientras se va acercando y luego durante la subida. Prueba a hacerlo, y verás que tiene el mismo efecto en ti.
CURIOSIDAD: a pesar de que la plaza se llama "de España", la escalinata de la Trinidad dei Monti está vinculada sobre todo a Francia. De hecho, fue encargada y financiada por un cardenal y diplomático francés, que es por lo que en la iglesia de la Trinidad dei Monti se celebran también misas en francés, Villa Medici es la sede de la Academia de Francia y en las piedras de la base de la escalinata hay esculpidos lirios, que eran el símbolo de Francia.