Alejandro Severo fue un emperador romano que gobernó desde el año 222 hasta el 235. Fue conocido por su gobierno relativamente pacífico y su intento de reformar el Imperio Romano. Durante su reinado, promovió la justicia y el equilibrio en la administración imperial, y se dice que fue un gobernante tolerante en cuanto a la religión y la cultura. Sin embargo, su gobierno también enfrentó desafíos, como conflictos militares en las fronteras del imperio.