El Museo Ghibli es una de las atracciones turísticas más populares de Tokio. Está dedicado a las películas de animación japonesas de la productora Ghibli y te parecerá espectacular incluso si no eres muy fan de los dibujos animados. De hecho, combina las características de un museo para niños, un museo de tecnología y uno de arte de calidad, unidos por la técnica de la animación cinematográfica.
El museo se inauguró el 1 de octubre de 2001 siguiendo el proyecto de un director del Studio Ghibli, Hayao Miyazaki, que utilizó guiones gráficos similares a los que utiliza para sus películas.
La entrada al Museo está indicada por un peluche gigante de Totoro, un personaje fantástico del Studio Ghibli, y la entrada está decorada con ventanas y coloridas lámparas hechas a mano. Si miras al techo, encontrarás el fresco de un cielo azul con un sol brillante y sonriente rodeado de plantas y flores.
Incluso las entradas son un espectáculo; de hecho, son fragmentos de una película de dibujos animados que se pueden ver al trasluz.
Al entrar al edificio principal, te encontrarás en un espacio vacío que se eleva hasta una cúpula de vidrio donde nada una ballena amarilla. Aquí, tendrás que subir por unas escaleras de caracol de hierro decoradas con canicas de colores, atravesar puentes y balcones que serpentean por el edificio y que conducen a exposiciones, callejones sin salida y puentes colgantes, como en los palacios que aparecen en las películas de Miyazaki. Te parecerá que entras en un portal que conduce a un mundo de cuento de hadas.
El museo siempre ofrece nuevas exposiciones temporales dedicadas a los personajes de las películas, además de una exposición permanente dividida en cinco salas, que muestra de una manera realmente atractiva cómo se realiza una película de animación, desde la idea hasta el montaje.
No te pierdas el cortometraje, proyectado exclusivamente para los visitantes, del museo en el Teatro Saturn, donde la sala del proyeccionista es transparente y te permite ver cómo funciona.
Me despido con una curiosidad: el diseño del Museo se inspiró en la arquitectura de un pueblo fortificado llamado Calcata, ubicado en la cima de una colina rocosa cerca de Roma, en Italia.
Idioma: español