Los grandes almacenes de Brompton Road te ofrecen nada menos que siete plantas dedicadas a las compras, una de ellas en el sótano, con una superficie total de más de 90.000 metros cuadrados. Las diferentes zonas están conectadas por la increíble cifra de 146 ascensores. Harrods tiene sólo esta sede en Londres, y en el resto del mundo cuenta con once sucursales en otros tantos aeropuertos internacionales. La única sede en el extranjero se encuentra en Porto Cervo, Cerdeña.
Una vez superados los controles de la entrada y de leer las normas de comportamiento, que se hacen cumplir estrictamente por parte de los vigilantes de seguridad, puedes finalmente sumergirte en este paraíso del "shopping" de alto nivel y de una variedad infinita.
Antes de desorientarte, dirígete de inmediato a la zona denominada "Egyptian Room", utilizando la mítica egyptian escalator, creada en 1998, exactamente cien años después de la primera escalera mecánica de la historia del Reino Unido (que se instaló precisamente aquí).
El tramo actual es obra del escultor y diseñador William George Mitchell, por encargo del entonces propietario de Harrods, Mohamed Al-Fayed. Mientras bajas lentamente, te encontrarás inmerso en una atmósfera exótica inspirada en el antiguo Egipto, con una escenografía propia de una gran producción de Hollywood, realizada con columnas gigantescas, jeroglíficos, bustos de faraones y techos con símbolos del zodiaco. A los pies de la escalera mecánica, además, puedes visitar una especie de santuario, con innumerables fotos, dedicado a la princesa Diana de Gales y a su pareja Dodi Al-Fayed. Lo hizo instalar su padre Mohamed, en memoria de los desafortunados novios muertos en 1997 en París en un accidente de coche, o tal vez asesinados, como sostiene el multimillonario egipcio.
Otra zona que no puedes dejar de visitar es la central, en la planta baja, dedicada a los productos alimentarios, donde podrás deleitar la vista, y si estás con ánimo de gastar, también el gusto, con deliciosos mariscos, quesos y embutidos, además de los más apreciados y delicados productos de pastelería. Pero no te olvides de que este imperio fue fundado por un tendero, así que presta especial atención a la zona del té.
CURIOSIDAD: una parada en los baños es inevitable, ya que aquí podrás encontrar una grata sorpresa a tu disposición, excepcionalmente gratis: jabones, cremas y finas fragancias.