Tu visita a la Torre de Londres continúa con la Torre Sangrienta/Bloody Tower, llamada así en recuerdo de los hijos de Eduardo IV que fueron encarcelados y asesinados en ella. De aquí pasas al Inner Ward, el amplio patio interior. Muy cerca, en la poderosa Wakefield Tower, construida en el siglo XIII, puedes visitar una exposición de instrumentos de tortura que evoca la siniestra fama de la torre.
El patio interior rodea la White Tower, que como te decía consta de cuatro delgadas torres en las esquinas, cubiertas por pequeñas cúpulas, con robustos contrafuertes que jalonan sus muros: sus paredes tienen hasta doce metros de anchura en la base.
Dentro, en la segunda planta, puedes visitar la preciosa Capilla de San Juan, conservada tal y como estaba cuando se construyó en torno al año 1080, en tiempos de Guillermo el Conquistador. Aunque de reducido tamaño, tiene una estructura con tres naves sobre pilares cilíndricos e incluso un corredor que rodea el altar principal. En la tercera planta encontrarás una notable colección de armaduras inglesas del siglo XVI.
Al salir de la White Tower y cruzando el patio interior llegas al Cuartel Waterloo/Waterloo Barracks, mandado construir a mediados del XIX por el duque de Wellington. En su interior se encuentra, bien protegida, la sala más valiosa, la que custodia las Joyas de la Corona/Crown Jewels. Se trata de una colección de gran valor simbólico pero también económico. Los objetos preciosos, como cetros, anillos y coronas, no son sólo piezas de museo, sino que puedes ver como todavía se usan durante las solemnes coronaciones de los soberanos de Inglaterra.
Entre los objetos más sensacionales te señalo el cetro del siglo XVII de Carlos II, coronado por el mayor diamante facetado del mundo, la llamada "Estrella de África", de 530 quilates; y la corona de la reina madre, de platino, en la que está incrustado el famoso diamante indio Koh-i-Noor, cuya historia se remonta al siglo XVI, y que según la leyenda, trae buena suerte a las mujeres que lo poseen pero grandes desgracias a los hombres. Y en efecto, todos los soberanos masculinos que han sido poseedores del diamante han muerto o han perdido el trono al poco tiempo.
CURIOSIDAD: en el patio de la Torre viven seis cuervos, atendidos por un cuidador que los alimenta, cuida de ellos y sobre todo, está atento para que no se vayan volando. De hecho, la tradición dice que si los cuervos se van volando de la Torre, ¡se pondría fin al reino de Inglaterra!
Idioma: español