Aunque no seas un apasionado de la historia, el Museo de Historia de Hong Kong hace que sea interesante y divertida para todos.
El edificio es muy reciente, como se puede intuir por el estilo moderno, y en sus 8.000 metros cuadrados de exposición se exhiben alrededor de 90.000 hallazgos entre los que se encuentran fósiles, rocas y minerales, conchas, sellos, billetes, monedas, documentos históricos y trajes tradicionales.
Explora las ocho secciones en las que se divide la exposición permanente «Historia de Hong Kong» y estoy seguro de que no te arrepentirás.
A lo largo del recorrido, distribuido en dos pisos, realizarás un viaje multisensorial a través de 400.000 años de historia de Hong Kong y del sur de China, desde la era del Paleozoico hasta la reunificación de la ciudad y su madre patria en 1997.
No te esperes solo una serie de vitrinas donde pararte a leer todos los carteles; este museo ofrece mucho más: maquetas, reproducciones realistas de entornos naturales y escenas de la vida cotidiana, vídeos, efectos de luz, 53 programas multimedia, espectáculos teatrales y ambientes interactivos.
Descubre no solo la historia, sino también la fascinante evolución de la cultura, de las tradiciones y de los trajes chinos.
Los temas principales tratan sobre la historia natural, la historia local y la etnografía, el estudio de las etnias presentes en el territorio desde el pasado hasta la actualidad.
Como cada sala está dedicada a un tema específico y a un período histórico, puedes elegir pararte en las que más te atraigan.
Podrás recorrer desde el entorno natural con flora y fauna hasta la época prehistórica; desde la evolución de las diferentes dinastías hasta la cultura y el folclore local; desde las Guerras del Opio hasta la cesión de Hong Kong a los ingleses; desde el nacimiento y desarrollo de la metrópoli hasta la ocupación japonesa durante la Segunda Guerra Mundial y la reincorporación de la ciudad en China.
En el museo también encontrarás varias exposiciones temporales fascinantes.
Me despido con una curiosidad: ¿a quién no le gusta pasear por la playa y recoger conchas? Evidentemente no se puede hacer en el museo, pero se pueden admirar 750 ejemplares increíbles de todas las formas y colores, procedentes de las playas y del fondo marino del mar del Sur de China.