Al cruzar la puerta románica de San Severo, de mármol blanco, te encontrarás en el claustro, un oasis de tranquilidad rodeado de galerías góticas de los siglos XIV y XV. El principal atractivo de este claustro, que es casi tan grande como la propia iglesia y que sirve de jardín, con altas palmeras y magnolias, son las inconfundibles ocas blancas. Si pruebas a contarlas, verás que son 13, como los años de Santa Eulalia cuando fue martirizada y el número de las torturas que tuvo que sufrir antes de morir.
Las ocas están muy bien cuidadas, de hecho, tienen un estanque para ellas solas, ¡con una fuente del siglo XV coronada por una estatua de San Jorge a caballo! Esta fuente se decora con flores con motivo de la fiesta del Corpus Christi, cuando sobre el surtidor de agua se mantiene en equilibrio una cáscara de huevo vacía, símbolo de la hostia consagrada. La tradición del ''ou com balla", es decir, la "danza del huevo", se remonta al siglo XVIII.
Entre las capillas que se abren a los lados del claustro te señalo la dedicada a la Verge de la Llum, Nuestra Señora de la Luz, patrona de la electricidad y la fontanería. Otra capilla que tienes que ver es la dedicada a la memoria de los 930 religiosos (sacerdotes, monjas y monjes) que fueron asesinados durante la Guerra Civil española. Se encuentra cerca de la Capilla de Santa Lucía, que se incorporó a la Catedral más tarde, pero que en un principio era una estructura separada: de hecho, dando la vuelta al exterior de la Catedral te habrás dado cuenta de que la Capilla tiene una entrada desde la calle, con una hermosa fachada embellecida por arcos de medio punto. Esta capilla se llama también "de las vírgenes", porque la santa, además de ser la protectora de la vista, lo es también de las muchachas solteras.
Justo al lado de la Capilla de Santa Lucía puedes visitar el Museo de la Catedral, una refinada colección de retablos y pinturas religiosas, entre las que te destaco especialmente la Piedad de Bartolomé Bermejo, uno de los grandes maestros del siglo XV español.
Curiosidad: una antigua leyenda vincula el origen de la Catedral con un episodio milagroso. La hermosa hija del conde de Barcelona fue violada y asesinada a la edad de trece años por un ermitaño endemoniado, pero volvió a la vida después de recibir los sacramentos, y al abrir los ojos dijo que en ese lugar se debía construir una iglesia.
Idioma: español