En el número 348 de via Toledo te encontrarás con el Palacio Cavalcanti, con base de bloques de forma almohadillada y portada encajonada entre dos columnas. Antes de llegar a la plaza Carità, en el número 352 verás el Palacio del Nunzio Apostolico, sede de la misión diplomática de la Santa Sede ante el Reino de Nápoles primero y luego ante el Reino de las Dos Sicilias.
Antes de cruzar la plaza Carità, gira un momento a la izquierda en via San Liborio, y tras avanzar unos pasos echa un vistazo al patio del siglo XVIII del Palacio Trabucco: al fondo podrás contemplar una escalera muy original, ubicada sobre tres secuencias de arcos con aberturas escalonadas: una verdadera joya.
Volviendo sobre tus pasos cruza la puerta del cercano Palacio Mastelloni y déjate sorprender por la escalera, aún más espectacular y monumental de este otro patio donde, por cierto, se encuentra desde hace más de 150 años la tienda de pianos más antigua de la ciudad.
En la plaza Carità puedes curiosear entre los puestos de un popular mercado y ver el imponente Palacio del INA, diseñado durante la época fascista. Los napolitanos siguen llamando a esta plaza de forma familiar "Salvo d'Acquisto", en honor del vicebrigadier al que está dedicado el moderno y polémico monumento que ves en el centro, construido en los años 70.
En el número 368 de via Toledo, detente para observar el Palacio Della Porta, que muestra el escudo de este noble linaje sobre la puerta.
Luego pasa junto a las cortas escalinatas que conducen a las tres portadas de la iglesia barroca de San Nicolás alla Carità, del siglo XVII, en cuyo proyecto colaboró el pintor Francesco Solimena, apodado "L'Abate Ciccio", autor de los frescos del techo y de los retablos de los lados.
Tu recorrido termina bordeando el Palacio del Conservatorio dello Spirito Santo, donde se acogía a las hijas de las mujeres de la calle y a las jóvenes pobres, mientras que ahora alberga la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Nápoles. Engloba además la iglesia del Espíritu Santo, del siglo XVI y restaurada en el XVIII, con una hermosa cúpula.
CURIOSIDAD: en 1943, con veintitrés años, el vicebrigadier de los carabineros Salvo D'Acquisto se proclamó autor de un atentado del que era inocente con el fin de salvar a 22 personas que iban a ser fusiladas por los alemanes, ocupando él su lugar. En 1986 se abrió una causa de canonización para el heroico carabinero.