Después de San Stae, a tu derecha, tienes de frente la poderosa mole de Ca' Pesaro, uno de los palacios más grandiosos del Gran Canal. Está totalmente revestido con piedra de Istria, su construcción se inició en el siglo XVII, en época barroca, y terminó a principios del siglo XVIII. Admira la elegancia de sus dos plantas con ventanas alternadas con columnas, y la apariencia fuerte y sólida de la planta inferior con piedras que sobresalen. En el interior puedes visitar dos museos: la Galería de Arte Moderno y el Museo Oriental.
A continuación, siempre a tu derecha, verás pasar la alta fachada de Ca' Corner della Regina, reconstruida en el siglo XVIII. El nombre recuerda a Caterina Cornaro, la noble veneciana que se convirtió en reina de Chipre y de la que te hago mención durante la visita a la Basílica de San Zanipolo.
Como puedes ver, en este tramo del Gran Canal numerosos edificios todavía tienen ventanas, galerías u otros elementos góticos: hacen casi de corona a la Ca' d'Oro, la joya del gótico tardío del siglo XV que ves brillar en el lado izquierdo.
Al lado de la Ca' d'Oro, en el lado del muelle, puedes ver que sobresale el Palacio Sagredo, hoy sede de un exclusivo hotel, y que en la fachada muestra restos medievales.
De frente, no te costará reconocer los toldos, el pórtico y la galería de las Pescherie, un histórico y animado mercado de pesado. El conjunto data de principios del siglo XX. Después de un corto tramo de ribera, llegas al largo y monótono edificio del siglo XVI de las Fabbriche Nuove, o Fábricas Nuevas, que tienen de frente la Ca' da Mosto, con partes de estilo véneto-bizantino del siglo XIII.
Justo antes del Puente de Rialto encontrarás dos edificios muy importantes, uno frente al otro: a tu derecha el Palacio dei Camerlenghi, a la izquierda el Fondaco dei Tedeschi, que como sede comercial de los comerciantes germánicos, era uno de los pilares de la economía veneciana. Después de un gravísimo incendio, fue reconstruido rápidamente a principios del siglo XVI, y especialmente decorado por nada menos que Giorgione y Tiziano, pero por desgracia de aquellos frescos sólo quedan restos, conservados actualmente en la Ca' d'Oro.
CURIOSIDAD: a propósito del Palacio dei Camerlenghi, debes saber que como era la tesorería de la ciudad, en la planta baja estaba la prisión donde metían a los que no pagan sus deudas. Dado que los presos eran bien visibles por los transeúntes, ¡los venecianos se lo pensaban dos veces antes de contraer deudas que no podían saldar!