Alexanderplatz es la plaza más grande de Berlín y una de las más extensas de Europa.
La historia de este gran espacio abierto fundamenta sus raíces en la Edad Media, cuando albergaba el mercado del ganado del que deriva el primer nombre de la plaza: Ochsenmarkt o «mercado de los bueyes».
Adoptó el nombre de Alexanderplatz por voluntad de Federico Guillermo III de Prusia, con ocasión de la visita a Berlín del zar Alejandro I de Rusia el 25 de octubre de 1805.
A finales del siglo XIX, con la construcción de la gran Estación Ferroviaria y de un enorme mercado cubierto, Alexanderplatz se convirtió en el centro de la vida comercial y social de la ciudad.
Devastada durante la Segunda Guerra Mundial, la plaza renació en la posguerra como centro neurálgico de Berlín Este y se transformó en un enorme espacio peatonal.
La mayor parte de los edificios que ves son de los años sesenta y setenta; en este momento, la plaza fue objeto de una intensa intervención constructora. Actualmente, los edificios albergan tiendas y centros comerciales, mientras que el área peatonal está llena de puestos que venden comida típica alemana, lo que convierte este lugar en una parada obligatoria para los turistas.
Te recomiendo que prestes atención al gran reloj mundial Urania, construido en 1969 por Erich John. Como puedes observar, la gigantesca estructura se apoya en una rosa de los vientos dibujada en el suelo. El cilindro superior está dividido en 24 caras, que se corresponden con los 24 husos horarios de la Tierra. A cada huso horario le corresponden unos paneles de aluminio en los que están inscritos los nombres de las ciudades más importantes, mientras que en el centro gira un anillo con las horas. En la parte superior, destaca una representación del sistema solar
En la esquina con el bulevar Karl-Marx-Allee, echa un vistazo a la Haus der Lehres, «casa del profesor». Tiene un mosaico de vidrio esmaltado, una de las pocas obras de arte del régimen comunista que no ha sido destruida o cubierta.
Me despido con una curiosidad: la plaza debe parte de su fama a la novela de Alfred Döblin, Berlin Alexanderplatz. Puedes leer un fragmento escrito en alemán, en grandes caracteres, sobre la larga fachada del antiguo Haus der Elektroindustrie, actualmente sede de los Ministerios de Medio Ambiente y de la Familia.