Hoy en día, Berlín está considerada la capital de la cocina vegetariana y vegana y, por lo general, ofrece especialidades internacionales; pero no te preocupes, ya que también podrás probar los platos típicos de la gastronomía alemana.
La especialidad por excelencia es el Wurst, una salchicha de carne de cerdo o de hígado y pollo, aromatizada y preparada de mil formas distintas. El más conocido es el Bratwurst, una salchicha de carne de ternera, cerdo o res finamente picada.
También hay salchichas de sangre cocida: el Blutwurst y el Schwarzwurst.
La especialidad de Berlín es el Currywurst, una salchicha de ternera aromatizada con curry, como muestra de la pluralidad étnica de la ciudad y de su comida.
También podrás probar el Wiener, una salchicha mucho más fina, ahumada y con la carne triturada en trozos más grandes.
Junto con los quesos, fiambres y pan, el Wurst es la base del desayuno alemán, pero además constituye una comida rápida.
La cocina alemana no cuenta con un verdadero primer plato, sino con una sopa: las más comunes son la de cebolla, de setas o la Gulash Suppe, con pimentón y carne.
Entre los segundos platos, podrás probar especialidades típicas prusianas, como las Königsberger Klopse, unas albóndigas servidas con una densa salsa de huevo, nata y alcaparras. También podrás degustar especialidades de la gastronomía nacional, como el Sauerbraten, «asado negro», que consiste en un filete de carne de res, cerdo o caballo que se cocina después de haberlo dejado marinar en vino durante días. Son muy populares los tradicionales estofados de carne de cerdo o res con verduras servidos en su propio caldo de cocción, que se espesa con harina y mantequilla.
Otro plato típico de Berlín es la pierna de cerdo estofada, acompañada con chucrut y col cocida con vinagre.
Además del chucrut, las guarniciones más comunes son las Bratkartoffeln, patatas salteadas con cebolla y beicon, o la famosísima Kartoffelsalat, una ensalada de patatas cocidas con mayonesa y crema agria.
Curiosidad: el postre que se conoce en todo el mundo con el nombre de Berliner, un bollo relleno de mermelada, en Berlín se llama Pfannkuchen.
¡Que aproveche!
