Después de bordear la cancela que encierra las 20 hectáreas del parque del Campo del Moro, estarás en el paseo de la Virgen del Puerto, el único acceso abierto al público.
¡No te dejes engañar por la modesta cancela! Te espera una vista impresionante del hermoso y cuidado jardín que se extiende hasta el Palacio Real. El camino principal del jardín, trazado a mediados del siglo XIX, está interrumpido por dos maravillosas fuentes de mármol blanco: la Fuente de las Conchas y la Fuente de los Tritones. Esta última, por desgracia, resulta inaccesible debido a que ya se encuentra dentro del Palacio Real.
Bajo los escalones de piedra, rodeado de arbustos y rocas artificiales, no puedes visitar tampoco el "Túnel de Bonaparte", que actualmente está cerrado. Es una cueva artificial, construida a principios del siglo XIX para conectar el Palacio Real con el parque.
Para pasear por el parque, hazme caso: consigue o haz una buena foto del mapa, ¡de lo contrario corres el riesgo de perderte en su laberinto de senderos!
Partiendo del busto de Juan Carlos I (el rey que abrió el parque al público), coge por el Paseo de Circunvalación. Superada una rústica techumbre que protege un extraño carro de seis ruedas, llegarás al Estanque de los Carruajes, uno de los lugares más románticos del parque, habitado por patos de carne y hueso y ranas de piedra. En frente se encuentra el Museo de Carruajes, ahora cerrado. Después del puentecito, a la derecha verás un hermoso rosal dominado por una fuente, y a la izquierda un bosque de bambú en miniatura: todo entre estupendos ejemplares de pavos reales que deambulan en gran número por el Campo del Moro.
Ahora haz una pausa, da la vuelta y toma por el amplio Paseo de Damas.
Entre plantas centenarias, jarrones decorativos e incluso pintorescos cubos de basura de mimbre, llegarás al delicioso Chalé del Corcho, de la segunda mitad del siglo XIX. Poco después, otra joya: el Chalecito de la Reina, de estilo tirolés, cuyos tejados parecen añorar una nieve que hace años que ya no cae en Madrid.
CURIOSIDAD: te preguntará quién será este Moro que da nombre al parque: para descubrirlo deja a tu espalda la estatua de la reina Isabel II, y después de un estanque y un bosquecillo encontrarás un camino dedicado a Alí Ben Yusuf. Él es el "moro" que poco después de 1100 trató en vano de reconquistar Madrid. Sus tropas estaban "acampadas" justo en estos terrenos donde ahora se extienden los pacíficos jardines del Campo del Moro.
Idioma: español