San Mauricio es una de las iglesias ¡más queridas por los milaneses!
En el animado corso Magenta, no lejos de San Ambrosio y de la Pinacoteca Ambrosiana, se encuentra una de las iglesias más queridas por los milaneses, San Mauricio. No te dejes engañar por el aspecto externo poco llamativo, en el interior encontrarás una arquitectura de elegancia extrema, revestida de magníficas series de frescos que cubren una superficie total de cuatro mil metros cuadrados, ¡tanto es así que están definidos como la "Capilla Sixtina" de Milán! El autor es uno de los mejores pintores activos en Milán en el siglo XVI: Bernardino Luini.
Sin embargo, a pesar de tanta magnificencia, el XVI fue un siglo difícil para Milán: después de la caída del ducado de los Sforza, la ciudad se convirtió en un campo de batalla disputado por los reyes de Francia y España, produciéndose hambrunas y epidemias.
San Mauricio fue fundada a principios del siglo XVI en una zona con muchos restos antiguos: por ejemplo, el campanario, que puedes ver en el lado izquierdo, es en realidad una torre que data de la época del Imperio romano. Fundada como iglesia de un convento de monjas, la iglesia tiene el interior dividido en dos espacios: la parte pública y la parte reservada a las monjas. Las paredes están adornadas con una elegante galería, con capillas laterales con abundantes frescos. Pero es sobre todo la pared divisoria, denominada coro alto, la que merece tu atención: están representadas varias santas y escenas de la vida de San Mauricio, obra de Bernardino Luini.
Pasa por una capilla a la izquierda y llegarás a la parte trasera, donde también puedes admirar los frescos de la parte posterior de la pared divisoria, igualmente de Luini. También hay un espléndido órgano del siglo XVI, de hecho, aquí puedes asistir a exquisitos conciertos de música antigua.
Si todavía tienes un poco de tiempo, acabada la visita a la iglesia, puedes echar un vistazo al Museo Arqueológico, que se encuentra ubicado en los espacios conventuales, y que contiene obras de arte griego, etrusco y sobre todo romano.
CURIOSIDAD: busca el fresco que representa el Arca de Noé y observa cuidadosamente todos los animales: descubrirás que entre ellos hay incluso dos criaturas legendarias: dos unicornios.