MUSEO ARQUEOLÓGICO

Esculturas

Ver todo el contenido de Nápoles
Audio Guide length: 2:47
Autor: STEFANO ZUFFI E DAVIDE TORTORELLA
español Idioma: español
Comprar

¡Este museo es uno de los más bellos de Italia!

El gran palacio del siglo XVI en el que te encuentras para visitar el Museo Arqueológico era originalmente la sede de una universidad. Pero ya en la segunda mitad del XVIII el rey Fernando IV de Borbón lo acondicionó como museo para dos grupos de restos muy importantes: las grandes estatuas grecorromanas de la Colección Farnese, procedentes de Roma, y los hallazgos de las excavaciones de Pompeya, Herculano y Estabia, cuya exportación era urgente detener. A estos dos núcleos se añadieron posteriormente otras colecciones, que han ampliado su ámbito hacia otras civilizaciones antiguas, como la egipcia.

Actualmente, el MAN, como se conoce debido a sus iniciales, es famoso en todo el mundo, gracias en gran medida a los restos provenientes de las ciudades sepultadas por el Vesubio. Pero además es una formidable institución cultural que cuenta con una amplia gama de actividades, dirigidas a todos los públicos, con especial atención a los niños, con una renovación constante de las secciones expositivas. Entre las reaperturas más recientes te señalo la de la colección de lápidas e inscripciones, con raros ejemplos de escritura de pueblos de la Italia central y meridional, anteriores a las conquistas romanas.

En cuanto a las esculturas, los dos platos fuertes son dos grupos colosales encontrados en las Termas de Caracalla de Roma, ambos copias romanas de estatuas griegas.

El Hércules Farnesio te muestra al musculoso héroe apoyado en un garrote.

El Toro Farnesio es el mayor grupo de mármol encontrado intacto perteneciente a la época clásica: representa el suplicio de la pérfida Dirce, condenada por su crueldad a ser pisoteada por un toro.

En la sección de retratos de personajes célebres no te pierdas el conmovedor bajorrelieve funerario con Hermes, Eurídice y Orfeo. Ilustra el mito de Orfeo, que trata en vano de traer de vuelta a la Tierra desde los Infiernos a su amada Eurídice: el relieve habla de la inevitabilidad de la despedida, con extrema elegancia, pero también con profunda tristeza.

 

CURIOSIDAD: cuando se descubrió la estatua de Hércules Farnesio, le faltaban algunas partes. Guglielmo della Porta, discípulo de Miguel Ángel, le esculpió las dos pantorrillas. Luego se encontraron las originales, que finalmente se reincorporaron a la estatua. Aunque en la pared situada detrás del Hércules aún puedes ver las dos pantorrillas esculpidas por Guglielmo della Porta, expuestas en señal de agradecimiento.

TravelMate! La aplicación de viajes que te proporciona información sobre las maravillas del mundo.
Comparte en